La chaqueta del momento se encuentra a medio camino entre el barrio de Salamanca y las calles más ‘cool’ de Copenhague.
No todas las prendas consiguen trascender generaciones, países y esferas sociales, y lograr convertirse en un must have de cualquier armario.
La chaqueta Husky tiene la suerte de cumplir con todo lo anterior, y este extraño 2020, la moda ha encontrado refugio en este clásico, el cual fue inventado por un aviador retirado y que la propia realeza británica se encargó de adopta poco tiempo después para sus jornadas de caza. También se extendió como el clásico uniforme pijo y hoy en día adquiere un nuevo significado gracias a diferentes personajes: las fotos de archivo de Lady Di, las influencers danesas, y la propia Melania Trump.

la historia del Husky en los últimos años ha sido de lo más dispar. Lo encontramos como plumífero en el año 2016, de la mano de Balenciaga.
Dos inviernos después, fue Prada quien se encargó de darle un giro a ese acolchado, y se lanzó a sacarlo en pasarela en colores neón. Y, en los siguientes años, fueron marcas como Gucci, Zara, o Isabel Marant, las encargadas de seguir con la expansión.
En el street style, como no, Copenhague se consolidó como la ciudad estrella para lucia este tipo de prenda.
Hoy en día conseguir un Husky original es una tarea prácticamente imposible, aunque los más afortunados se pueden hacer con uno en alguna tienda de segunda mano.